El Valladolid encuentra el premio

EL LEVANTE OFRECIÓ UNA PÉSIMA IMAGEN EN EL NUEVO JOSÉ ZORRILLA


Un bonito gol de Jonathan Sesma dio la victoria al Valladolid frente al Levante, en un encuentro dominado de punta a punta por los de Mendilibar. Los granotas dio una pobre imagen durante todo el partido y el Valladolid se armó de paciencia para derribar el muro levantinista. Así, en un balón suelto en el área en el ecuador de la segunda parte, Sesma enganchó un precioso remate a la media vuelta que superó a Storari y dio un justo premio a su equipo, que fue el único que quiso ganar.

El partido fue un ejercicio de paciencia por parte del Valladolid. El Levante empezó asustando con un cabezazo de Riganó en el minuto dos y a partir de ahí se fue del partido. El equipo de De Biasi entregó el campo y el balón al Valladolid y esperó en su campo. Pero sólo hizo eso, esperar, porque apenas salió al contraataque. Vivar Dorado empezó a mover los hilos del equipo pucelano, que tocaba y tocaba, esperando encontrar un hueco.

Al Valladolid le faltó claridad en los últimos metros para marcar la diferencia. La mejor ocasión la tuvo Rafa, que envió alto un cabezazo en el área pequeña. El balón merodeaba todo el rato el área de Storari. El Levante estaba agobiado y Riganó era un islote que de vez en cuando peleaba algún balón aéreo, pero nada más. La posesión a favor del Valladolid superaba el 70%. Alberto y la línea de cuatro vallisoletana vivían tranquilos.

Con el paso de los minutos, el Valladolid perdió algo la paciencia y buscó más el juego directo. En los únicos momentos en los que el Levante se atrevió a pisar el área pucelana, el Valladolid encontró el justo premio. Sesma aprovechó un balón rechazado tras un salto entre Llorente y Descarga para rematar a la media vuelta con la zurda de forma preciosa. Además de ser un premio merecido para el Valladolid, también era el justo castigo al Levante.

El Levante ni siquiera se echó arriba con desventaja en el marcador. El Valladolid siguió con la posesión de balón y esta vez no tuvo problemas para manejar el resultado. Los granotas siguen en el fondo de la tabla, ofreciendo señales preocupantes y viendo cómo sus rivales empiezan a alejarse. Entre ellos el Valladolid, que ya sabe lo que es ganar en casa y que comienza a obtener las rentas de un fútbol más que correcto.